(142) Hiperbreves III

 

NUNCA ES TARDE

Patricia Dagatti, Argentina

Harta de repetir la historia, evadió al leñador y se internó en el bosque. Esa noche, ajena a la súplica de los lectores, Caperucita se comió al lobo.

RENDICIÓN

Sara Coca, España

Como a los niños nunca se les cuenta la verdad, le dijimos que le queríamos. Después le besamos para que sonriera en la foto. Su sonrisa angelical convencerá a cualquiera de que es un niño normal. A ver si hay suerte.

PAJARITOS DIURNOS:

Sergio Astorga, México-Portugal

  Qué más dulzura que los pajaritos detenidos por la pata. Jugar a la suerte cuando se arrejuntan las luces amasando redondeces.

TRES COSAS EN LA VIDA

Elena Bethencourt, Islas Canarias, España.

Y en aquel mundo tan cambiado, las mujeres daban a luz libros de los que crecían rosas. De las rosas brotaban niños lectores que se convertían en árboles cuyo fruto eran hombres que amaban a mujeres que, al sembrar palabras, engendraban libros...

PETICIÓN

Carmen Cano Soldevilla, España

"Cambio poemario por alimentos", rezaba el cartel del poeta pobre. "Tengo musa que mantener".

BIPOLAR

Virginia González Dorta, España

En una mano, el cuchillo. En la otra, la Biblia. Solo quiere acabar el trabajo y poder arrepentirse.

FICCIONES

Roberto García  de Mesa, Santa Cruz de Tenerife, España

Hizo de su vida una ficción. Una vez se aseguraron de que había muerto, todos hicieron de él otra ficción.

 

GATO NEGRO

Eliana Sosa Martínez, Bolivia

Sus ojos cuentan tus pesadillas.

 

LA MISMA HISTORIA

Audberto Trinidad Solís, México

Varias veces me dijeron que el pelo corto me quita años, así que decidí raparme. Ahora que soy bebé me arrepiento: dentro de ocho años me violará de nuevo el zapatero.