> Letras Itinerantes: (128)Diego Miguel Alba

miércoles, 16 de febrero de 2022

(128)Diego Miguel Alba

 




La inmensidad

Y al salir, por fin, del laberinto, no supo qué rumbo tomar.

 

Génesis

Y Dios dijo, hágase la duda. Quizás.

 

La amansadora

—Disculpe, buen hombre, ¿podría informarme para qué es esta fila?

—Desde luego, esta es la fila para morir.

—No parece avanzar mucho...

—Es que, bien mirado, esperar y morir son la misma cosa.

 

El monito

Bajó del coche y soltó el maletí­n.

Colgó el sombrero y el paragua. Se quitó los auriculares y los lentes, apoyó el celular, las llaves, la billetera. Se sacó el reloj, el anillo, la cadena y un arete.

Se descalzó y se desnudó por completo.

Más trabajo le dio arrancarse la religión, la ciencia, la técnica, el arte.

Convertido ya en un completo animal, se metió en su madriguera a descansar, hasta las siete en punto.

 

Dulce o truco

—¿Quién es?

Una voz familiar me respondió del otro lado.

—Abre la puerta, soy yo.

Abrí la puerta y me desmayé al comprobar que, efectivamente, era yo.

 

Abracadabra

Desde la nada me compongo a mí mismo. Recién no existía y ahora soy tan real como esta voz hablándote. En el mismo acto te concibo a ti y al cuartito despojado, apenas un puñado de palabras, que nos ha reunido a ambos. ¿Me estás mirando? También te miro.  Te saludo y como en un sortilegio nos alejamos, deshacemos este fortuito encuentro. Tú te vas sin duelo y yo me quedo aquí, esperando paciente al próximo visitante.


Beneficios de la lectura

El bosque se estremeció con un grito de terror. Caperucita cortaba flores para llevar a su abuelita cuando encontró entre los arbustos, una camisa escocesa ensangrentada y un hacha con marcas de dientes.

La mujer del leñador reconoció las prendas de su marido y una partida armada se encaminó al cubil del lobo. Encontraron la guarida abandonada. Sobre la mesilla de noche reposaban el carné de la biblioteca y un libro de cuentos infantiles.

 

EL AUTOR

Soy Diego Alba, vivo en Buenos Aires y escribo estas pequeñas historias que se me ocurren todos los días para compartirlas con ustedes. En su mayoría se trata de microcuentos, todos de mi autoría y surgen a partir de las cosas que veo en la calle o que pasan en mi vida. Me he preguntado a veces, ¿Qué es ser un escritor? Y yo digo que solo es escribir. Para alguien, para nadie, para ustedes y para mí. Pongo mi corazón en ello y eso debe significar algo.


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