Microcuentistas hispanoamericanas
Esta primera entrega del 2019 la iniciamos con la palabra de siete escritoras de Hispanoamérica en el arte de contar historias brevísimas. Siete grandes microcuentistas nos comparten esta vez sus escritos y la magia de narrar en corto.
LISTA DE ESPERA
Karla Barajas (México)
Pinocho ruega que el hada madrina lo convierta en
niño; la niña con el brazo roto, la cara llena de hollín implora la haga una
muñeca, no soporta el dolor en la ruptura. También porque sus amigos no son los
del mundo y la dejan morir en ese
rincón. El hada escucha primero las peticiones de Pinocho y le dice las
condiciones para cumplir su deseo.
La niña está más
azul por la hipotermia. Su cabeza se inclina, caen los brazos a un lado de sus
piernas abiertas. Una lágrima le escurre y no es de aserrín. El hada mueve la
varita una vez y convierte a Pinocho en niño y la eleva nuevamente pero el alma
de la niña ya no está en la tierra.
Se dice para
reconfortar su conciencia burocrática; los tiempos de un hada no son perfectos,
los de Dios sí. Descansa en paz niña.
EL CUENTO
Carmen Cano (España)
Protesto, Señoría. Sin
duda, la denunciante habrá sido acunada con cuentos. Y conocerá el peligro de
adentrarse en el bosque con su llamativa caperuza de color rojo. Nunca debió
detenerse a recoger unas flores ni mantener conversación alguna con mi
defendido, que se limitó a obrar según su instintiva naturaleza.
EQUÍVOCO
Norah Scarpa Filsinger (Argentina)
Olisqueó la hierba apenas verde y el escozor en las fosas nasales le
hizo dar un brinco. Frotó su nariz contra el colchón de hojas secas largo rato.
Luego, con paso grácil trotó entre la enramada tupida del bosque, dejando
largas crines brillantes sobre los troncos, las hojas, el silencio.
Al salir a un claro, levantó la testuz
y el viento trazó oleadas sobre su cabellera; de un salto asentó los cascos
delanteros sobre el manantial salpicando en arcoíris millares de gotas a su
alrededor. Cerró los ojos a los minúsculos diamantes que se desparramaban sobre
su cabeza y piafó largamente su soledad.
Creía ser un unicornio, pero era tan
solo un caballito blanco.
LA PERRA
Mariana Libertad Suárez (Venezuela)
Como siempre que terminaban de copular, borracho y
desencajado, la imaginaba llorando. En medio de su fabulación, se preguntaba:
¿Qué pretendía con eso?, ¿hacerlo sentir culpable? Sin que mediara palabra, la
golpeaba salvajemente y cuando creía que había terminado, gritaba furioso:
“¡Desaparécete, perra!”.
Esa vez, la
borrachera había llegado a un tope y, sin quererlo, pronunció aquel grito en
voz alta.
Entonces
ella, sin poder adivinar lo que él soñaba, se sintió en la obligación de
obedecer. Lo miró a los ojos, se puso en cuatro patas y esperó que su dermis se
llenara de pelos. Desde su rostro canino, contempló cómo aquel hombre atónito
devenía en poste de luz. Sigilosa, se le acercó y, antes de marcharse para
siempre, se agachó a los pies del amo y liberó esa carga de heces que había
acarreado por décadas.
LA MODELO
María Cristina Botelho
Mauri (Bolivia)
Acababa de terminar
la pintura de un cuadro, evocando los días cuando la conoció. Ella aparecía con
los cabellos desordenados, los labios sensuales, y esos ojos negros y rasgados
que lo enloquecían. Llevaba puesta la
camisa de él, la que ella usaba cuando lo visitaba en su taller y hacían el
amor. Ella, se quitaba la ropa, desparramando las prendas al descuido,
tirándolas sobre el piso, como si le estorbaran; desnuda buscaba la camisa, la
acariciaba con fervor, y luego se entregaba al amor, el primero y gran amor.
Después de saborear el sexo, se
recostaban contemplando el fuego de una estufa a leña, les encantaba escuchar
el crepitar de las maderas. Se quedaban dormidos y plenamente convencidos de
que el amor es mucho más que el sexo, es soñar y dar la vida. Llevaban consigo, un amor sublime. Libre y sin ataduras.
Aquellos recuerdos estaban intactos
en la memoria de Juan.
Ella lo contempla desde el cuadro, él
repite el mismo ejercicio de volver a dibujar su cuerpo para tenerla presente.
Las pinturas datan de más de una
centuria de años.
Y NO PENSAR EN NADA
Lilian
Elpick (Chile)
A la rru rru nena no te duermas nunca, no pegues pestaña ni
labios, quédate despierta mirándome, recuerda el color del odio que te tengo,
recuerda que tus ojos son mis ojos, que has heredado la misma confusión inútil,
la esperanza de un tal vez mañana. A la rru rru, me canto otras canciones
antiguas de radio chicharra, meciéndote en mis brazos las palabras que él dijo
antes de irse, mucho antes, cuando el amor podía ser deletreado, cuando
galopaba mi noche entera, besando la orilla del abismo, ayudándome a recobrar
el aliento del deseo. No hay palabra que pueda definir el antes, nunca
entenderás que la tristeza eres tú misma. A la rru rru muerte, viniste a nacer
porque no hubo más remedio, por un simple asunto de gravedad caíste entre mis
piernas y no lloraste, no lo harás, como si supieras que las lágrimas no
solucionan nada, aunque te remezca y pellizque tus manos no lo harás; lo sé
porque te miro y una voz monótona responde por ti, un mamamamamá de muñeca a
pilas, la que permanecerá conmigo, sin molestar ni siquiera un segundo, sin
cagar todo el día o gemir de hambre, de frío, de poco cariño.
LA
MUJER DE SAL
Maribel
García Morales (Colombia)
Provocadora se
entregó al fuego de la multitud. Su búsqueda sensorial la llevó al fragante
olor de pieles ansiosas, dulces sabores y cálidas texturas sugeridas por nuevos
estímulos.
El mensaje
celestial interrumpió su goce y, casi arrepentida, abandonó la ciudad maldita.
Condenada a la
huida, quiso evitar que su cuerpo comenzara a despedir un perfume de azucenas,
y que el color de su piel cambiara hasta adquirir el blanco inmaculado. Antes
de convertirse en estatua, en sus labios reconoció un sabor puro, cercano al
que tanto tiempo había buscado y que prometía quedarse para siempre.
LAS AUTORAS
KARLA GABRIELA BARAJAS
(Tuxtla
Gutiérrez, Chiapas, México, 1982). Ha publicado minificciones en las antologías
Cuéntame un blues. Antología de
Minificciones (Editorial La Tinta del Silencio, 2013); Cortocircuito. Fusiones en la minificción (Universidad Autónoma de
Puebla, 2017).
Publicó
Neurosis de los bichos (Colección Minotauro,
La Tinta del Silencio, 2017), Esta es mi
naturaleza (Editorial Surdavoz, 2018).
Colaboraciones
suyas han sido incluidas en la Antología Virtual de minificción (José Manuel
Soto, coordinador); Microrrelato o minificción del día (Gabriel Ramos Zepeda,
coordinador); revista La Piraña; Plesiosauro. Primera revista de ficción
breve (Perú, 2017); Consultario.
Suplemento de cultura (2017); “Imaginario Fantástico” de la revista
Fantastique (2017); Alquimia Literaria
(España, 2017-2018); Revista Brevilla
(Chile, 2018); Argonauta. Revista
Cultural del Bajío (México, 2018).
CARMEN CANO
Valencia (España). Licenciada en Filología
Hispánica. Publica microrrelatos en las webs de 50palabras, ENTC y
cincopalabras.com, relatos en diversas antologías: ¡Que entre la luz!
(libro solidario contra la violencia de género y el maltrato infantil), Cuentos
de las Estaciones (del colectivo Valencia Escribe), Entintados (del
Aula de Letras de Barcelona), Hay esperanza (libro solidario contra el
cáncer). Finalista en el Concurso de RENFE Madrid (2017), seleccionada en la
Antología Canyada d’Art (2017), finalista en la Antología Canyada
d’Art (2018).
Como poeta ha sido ganadora
del 2 Premio y de un Accésit del grupo Numen (Comunidad Valenciana, 2016 y
2017), Mención Especial del Público en el V Concurso de Poesía José
García-Nieto (2018
NORAH SCARPA FILSINGER
Tucumán, Argentina. Publicó
Hojas al tiempo, poesía (2010). Cuentas de maíz, (2009), Incisiones mínimas,
(2011) y La vida y otras inquisiciones (2014), microficciones. Ed. Macedonia.
Obtuvo 1°premio en dramaturgia 2001, (Dramat, Secretaría de Cultura e Instituto
Nacional del Teatro) por su obra Estación sin rosas, con puesta y publicación y
premios en poesía (Sociedad Argentina de Escritores, Córdoba, 2000). Jurado en
diversos certámenes, participa en antologías nacionales y extranjeras.
MARIANA LIBERTAD SUÁREZ
(Caracas, 1974). Narradora y ensayista. Autora de
diversos artículos y libros académicos en torno a la escritura de mujeres.
Es docente e investigadora.
Entre sus publicaciones literarias están los libros
de cuentos Ni Magdalena ni Clemencia Isaura (2014), y Ciruelas y chorizos (2015); la novela
Deambulando hacia la lumbre (2010); el poemario, Oscura bisagra (2017) y la
novela infantil El doce de octubre.
MARÍA CRISTINA BOTELHO
MAURI
Lugar de origen: La Paz,
Bolivia
Residió durante algunos
años en Córdoba, Argentina y en Estados Unidos.
Poeta, ensayista y
narradora.
Libros editados: Poemas en
Vigilia (poesía), El duende y el colibrí (prosa poética), La última estación
(cuentos), Memoria de las mariposas (cuentos), El absurdo y su complicidad
(cuentos y microcuentos), Agonía de los espejos (poesía) 2º. Lugar del Premio
Nacional de Poesía “Franz Tamayo 2018”.
Su obra figura en antologías de Bolivia, Perú, Uruguay, Estados
Unidos, Argentina e Italia.
Reconocimiento y distinción
a su trayectoria, Sigma Epsilon Award 2015- IUPUI – Indiana, U.S. Galardonada por la Asamblea Legislativa del
Estado Plurinacional de Bolivia, del Departamento de La Paz (abril 2018) y por
la Asamblea Legislativa del Departamento de Oruro (agosto 2018).
MARIBEL
GARCÍA MORALES
(Tunja, Boyacá) Licenciada en Idiomas
(Inglés - Español) de la Universidad Pedagógica y Tecnológica de Colombia UPTC.
Realizó estudios de Lingüística y Literatura Hispanoamericana en el Instituto
Caro y Cuervo. Escritora, traductora y realizadora de talleres de Promoción de
Lectura, Lectura Creativa y Creación literaria. Autora del libro de
microrrelatos Los matices de Eva (Bogotá,
Común Presencia Editores, 2004) y del libro de cuentos para niños El ataque de los lápices y otros cuentos (Tunja,
2011). Incluida en Árbol del
paraíso, Narradores colombianos contemporáneos (Bogotá, Los
Conjurados 2012), El placer de
la brevedad / Seis escritores de minificción y un dinosaurio
sentado (Tunja, UPTC, 2005); en Nosotras, vosotras y ellas (Buenos Aires, Editorial Desde la
Gente, 2006); en la Segunda antología del cuento corto colombiano (Bogotá, UPN,
2007); y en Por favor sea breve
2, Antología de relatos hiperbreves. (Madrid,
España, Páginas de Espuma, 2009). Obtuvo Mención de Honor en el Concurso
Internacional de Cuento Prensa Nueva (1995). Finalista en el Concurso Nacional
de Minicuento «200 años, 200 palabras», RELATA Cúcuta. Sus cuentos,
traducciones del inglés y sus artículos han sido publicados en diferentes
libros y revistas nacionales e internacionales. Actualmente trabaja como
correctora de estilo. Recuperado de
http://cuentobreve.blogspot.com
3 comentarios:
Excelente! Muchas gracias por esta sinfonía de voces.
Excelente. Muy grato encontrar estos textos . Hermoso el microrrelato de mi comprovinciana, Norah Scarpa Filsingir.Me encantó "La perra". Gracias.
Muy buenas todas, buenas representantes femeninas del género
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